Trabajo Práctico Nº 2

Documentos para trabajar en clase

Durante la etapa de la Confederación Argentina, en la cual, como vimos, la actual argentina estaba escindida en dos estados: el estado de Buenos Aires y el Estado de la Confederación Argentina, Se planteaban dos posibles vías para el desarrollo económico del territorio. Esas dos posiciones se ven reflejadas en estos dos documentos que les presento a continuación.
Mariano Fragueiro. Organización del Crédito. Cuestiones argentinas y organización del crédito, en Tulio Halperín Donghi. Proyecto y construcción de una Nación (1846-1880), Buenos Aires: Emecé, 2007. (Apéndice documental pp. 67 y ss.)

Mientras los capitales estén acumulados en ciertas manos favorecidas por la conveniencia recíproca e individual, el trabajo no es libre; porque, si bien se tiene el derecho de trabajar, falta el poder de hacerlo. Con el derecho apenas tendrá un salario, que equivale a la subsistencia, porque en la distribución de la riqueza no le cabe más parte. Con el poder, es decir, con el capital, tendrá la ganancia correspondiente a una distribución equitativa.

Socialícense los capitales, póngase al alcance del mayor número de capacidades, y la producción crecerá a la par de los individuos de la especie humana. “Los desórdenes, infamias y violencias que se manifiestan muy frecuentemente en la industria, no prueban sino una cosa, y es: que ella debe dejar de estar bajo el imperio del individualismo absoluto.” […]

 El crédito público es la entidad que dará subsistencia a la organización de la industria y de la que surgirán el orden, la libertad y la prosperidad. […] Considerando el poder público fundado sobre la riqueza nacional, y hasta donde puede extenderse la fuerza productora de los grandes capitales que ella forma, no se comprende por qué los gobiernos no han buscado en la industria pública la omnipotencia humana para aumentar su gloria, el bienestar y opulencia de los pueblos.

Juan Bautista Alberdi. Bases y puntos de partida para la organización política de la República Argentina, derivadas de la ley que preside el desarrollo de la civilización en la América del Sur, en Tulio Halperín Donghi. Proyecto y construcción de una Nación (1846-1880), Buenos Aires: Emecé, 2007. (Apéndice documental pp. 82 y ss.)

Nuestra prosperidad ha de ser obra espontánea de las cosas más bien que una creación oficial. Las naciones, por lo general, no son obra de los gobiernos, y lo mejor que en su obsequio puedan hacer en materia de administración, es dejar que sus facultades se desenvuelvan por su propia vitalidad. No estorbar, dejar hacer es la mejor regla cuando no hay certeza de obrar con acierto. El pueblo de California, no es producto de un decreto del gobierno de Washington; y Buenos Aires se ha desarrollado en muchas cosas materiales a despecho del poder opresor cuya omnipotencia ha sido vencida por la acción espontánea de las cosas. La libertad por índole y carácter, es poco reglamentaria, y prefiere entregar el curso de las cosas a la dirección del instinto.

1)     Identificar en ambos textos algunas palabras claves que hagan a la cuestión que se discute
2)     ¿Cuál es la opinión de Mariano Fragueiro acerca de la acumulación de capital? ¿La valora positiva o negativamente?
3)     ¿A qué o a quién hace referencia Alberdi cuando dice que lo mejor es “no estorbar”?
4)     ¿Cuál es la diferencia en la valoración que hacen ambos autores de la participación del estado en la economía? ¿Acuerdan?